Voluntariado a cualquier edad y sus beneficios

Si observamos la tendencias demográficas actuales en nuestra sociedad el grupo de personas mayores de 65 años es cada vez mayor, actualmente en torno al 18% de la población española supera esta edad. Pero igual que nuestra esperanza de vida ha aumentado también ha mejorado el estado de salud con el cual llegamos a esa edad, es por esto que muchos mayores se plantean que hacer con todo el tiempo libre que tienen porque se encuentran con que sus capacidades no están mermadas y que aún tienen mucho que dar a la sociedad.

Una de las opciones que está más en auge actualmente es el voluntariado.

Por qué ser voluntarios

El voluntariado en las personas mayores reporta grandes beneficios tanto a la persona mayor como a la organización y a la sociedad en general.

  • Ventajas sociales: mejorando la percepción social que se tiene del envejecimiento dando importancia a las personas mayores, mejorando su valoración e imagen social y difundiendo los valores de solidaridad, cooperación y respeto a la experiencia.
  • Ventajas económicas: la experiencia de los voluntarios mayores, en muchos casos profesionales, es una gran aportación en organizaciones con escasa financiación que no podrían disponer de esos conocimientos de otra manera.
  • Ventajas culturales: ya que se favorece el intercambio generacional de la experiencia acumulada a lo largo de vida, que en ocasiones es tan importante como las enseñanzas regladas.
  • Ventajas para los voluntarios mayores: pero sobre todo es una fuente de beneficios para los propios voluntarios porque nos ayuda a:
    • Sentirnos útiles. Con la jubilación y la salida de los hijos del hogar tenemos la sensación de que no tenemos un papel definido. Las personas que deciden iniciar una labor voluntaria manifiestan sentirse más satisfechas al volver a tener un papel productivo en la sociedad.
    • Mantenernos activos física y mentalmente. La labor voluntaria nos “obliga” a salir de casa y relacionarnos con otras personas, también nos obliga a tomar decisiones,… así mantenemos activo nuestro cuerpo y nuestra mente mejorando con ello nuestra salud.
    • Mejorar nuestra autoestima al ver que seguimos siendo útiles a los demás.

Donde podemos colaborar:

En Zaragoza hay dos programas del Ayuntamiento específicos para personas mayores que son el Voluntariado en Parques y la Dinamización de las Aulas de Centros de Mayores.

El voluntariado en Parques, según el Ayuntamiento, consiste en realizar visitas guiadas a grupos escolares, para enseñar el parque, mostrar sus rincones, explicar su historia, explicar su entorno, enseñar la flora, sus árboles y arbustos, enseñar juegos e itinerarios, en definitiva, ayudarles a conocer y apreciar la naturaleza. Para hacer de guía en el Parque, los voluntarios irán acompañados de un monitor de educación ambiental que servirá de apoyo a la visita.  http://www.zaragoza.es/ciudad/sectores/mayores/enlace/encasa/detalle_Tramite?id=12701

Mientras que la Dinamización de aulas en los Centros de Mayores es un programa en el que los voluntarios ayudan a sus coetáneos  a resolver dudas informáticas y realizan sesiones de iniciación al uso del ordenador. http://www.zaragoza.es/ciudad/sectores/mayores/cibervoluntarios.htm

 

Pero no solo hay que centrarse en programas creados específicamente para voluntarios mayores sino que en cualquier asociación, ONG,… que trabaje con voluntarios  nuestra aportación será muy valiosa así que podemos escoger el campo en el que deseemos realizar nuestra labor y dirigirnos a la organización adecuada donde nos acogerán y facilitarán un puesto voluntario acorde a nuestras inquietudes y posibilidades.

Si lo que quieres es vivir 100 años ….

Según cifras de la ONU, en 2025 habrá 1.100 millones de habitantes mayores de 65 años, lo que equivaldrá al 20% de la población mundial. Estas cifras récord en la historia provocarán un cambio en políticas sociales y económicas. Nuestra esperanza de vida ha aumentado espectacularmente, pasando de 45 años en la antigüedad a los 65 en 1960 y a los 85 en la actualidad.

El envejecimiento es un proceso que comienza en el mismo nacimiento y que consiste en una sucesión de modificaciones corporales, fisiológicas y psicológicas de carácter irreversible. No es únicamente el envejecimiento natural lo que nos hace sentir mayores, existen muchos otros factores externos sobre los que podemos influir para modificar y ralentizar su impacto en nosotros.

Si se excluye a las personas que desgraciadamente fallecen a edad temprana por enfermedades o accidentes, aquellas que alcanzan o sobrepasan la edad de 60 años y que nunca llegan a convertirse en centenarios, presentan diferencias significativas en cuanto a los siguientes factores:

  1. ALIMENTACION

Uno de los factores más estudiados y valorados. Esto se traduce en una reducción de calorías y una dieta equilibrada que contenga todos los nutrientes esenciales. Preferiblemente hay que evitar productos procesados, enlatados y precocinados, dando preferencia a la comida orgánica y natural. Comer crudo nos proporcionará más nutrientes y los alimentos fermentados ayudarán a nuestro sistema inmunológico.

  1. EJERCICIO FISICO

Estudios realizados en comunidades longevas sugieren la necesidad de una actividad física mantenida diaria y que no exceda las posibilidades del individuo ya que entonces provocaría un sobre-entrenamiento que sería dañino. Cambiando algunas de nuestras costumbres ya activamos nuestro organismo y fortalecemos el sistema circulatorio y muscular: Pasear diariamente, cambiar el ascensor por las escaleras, coger la bicicleta, pedalear mientras vemos la televisión, etc. El ejercicio al aire libre ayudará además a sintetizar la vitamina D gracias a la exposición al sol.

  1. HERENCIA Y GENETICA

Las características individuales presentan una base hereditaria en la estructura y funcionalidad de los órganos y sistemas, así como de los procesos metabólicos a nivel celular, los cuales están expuestos a los efectos negativos del estrés.

Por otro lado, existen enfermedades hereditarias que aceleran el proceso de envejecimiento, entre las más comunes la diabetes.Otras predisposiciones a enfermedades como el cáncer o las afecciones cardiovasculares producen un efecto similar y pueden acelerarse por el estrés crónico y mantenido.

En las comunidades longevas aunque no se puede hablar con exactitud de la relación de la herencia con los centenarios, es frecuente encontrar longevos que provienen de familiares que también lo han sido.

No obstante, analizando ADN de personas de entre 95 – 110 años y comparándolo con una muestra aleatoria de la población, se ha llegado a la conclusión de que sólo el 20 a 30 por ciento de las posibilidades de un individuo de alcanzar los 85 años está determinado por la genética, y el resto está determinado por el estilo de vida y el medio ambiente.

La labor que debe realizar el individuo y su médico de la familia es investigar las cuestiones antes señaladas en el ámbito familiar y de acuerdo con esto adoptar cualquier tipo de medida para prevenir la enfermedad y aumentar así la probabilidad de una larga vida.

  1. DESCANSO Y SUEÑO

Es un hecho que el dormir se relaciona directamente con la longevidad. No solo es importante la cantidad de horas de sueño, sino la calidad del mismo.

¿Cuánto deberíamos dormir?, obviamente habrá grandes diferencias individuales, pero un estudio que duró varias décadas, demostró que  los adultos que dormían más de 8 horas y menos de 7 presentaban un mayor riesgo de mortalidad.

  1. TIPO DE PERSONALIDAD Y RESISTENCIA AL ESTRÉS. PENSAMIENTO POSITIVO

La personalidad pro-longeva con sus características de alta resistencia ante el estrés y con hábitos saludables puede ser el factor de unión entre los restantes. Los hábitos de tal personalidad representan la suma de los factores que determinan una alta longevidad. En sentido general pueden realizarse varios proyectos o planes, pero nunca son competitivos entre sí, sino que son comparativos. En cada momento están resolviendo los problemas que pueden resolver y no martirizándose por lo que deberán afrontar mañana. Miden la eficiencia del trabajo por la calidad y no por la cantidad de este. Este tipo de personalidad parece operar consiguiendo un ajuste neuroendocrino inmunológico.

En contraposición, la personalidad anti-longeva representa su antítesis. Están presentes en ella muchos hábitos tóxicos. En realidad resulta difícil encontrar una personalidad pro-longeva al 100 % así como una completamente anti-longeva.

Sobre la base de lo anterior una línea de acción lógica sería la de reforzamiento de hábitos y características pro-longevas y la eliminación de los anti-longevos. No obstante el elemento individual resulta determinante con independencia de que en toda la personalidad existen factores hereditarios y adquiridos.

  1. FACTORES AMBIENTALES

 Para los efectos de salud y longevidad, las actividades de estilo de vida como el trabajo, el ejercicio y la dieta se consideran factores ambientales. Según «TechnologyReview» de MIT la investigación de los Adventistas del Séptimo Día demuestra que los miembros de la iglesia tienen una expectativa de vida que 88 años. A causa de sus creencias religiosas no fuman, no beben alcohol, no consumen carne y dedican sus fines de semana a los servicios religiosos y actividades familiares. Estas actividades mantienen su salud y disminuyen su nivel de estrés. Se sabe que la dieta, ejercicio, tabaquismo, consumo de alcohol, contaminación y otros factores ambientales son importantes en la determinación de la longevidad.

La educación se considera el factor social más importante para la longevidad, superando a otros factores como los ingresos, la raza y el seguro  de salud.

Desgraciadamente, la riqueza también está relacionada con un mejor estado de salud, no porque el rico no enferme si no porque tendrá mejor asistencia y acceso a tratamientos médicos.

7. CUIDAR NUESTRA VIDA SOCIAL / IMPORTANCIA DE LOS AMIGOS Y FAMILIA

Si usted se encuentra socialmente aislado, podría experimentar una mala salud y una vida útil más corta. Esto podría deberse, al menos en parte, a que aquella persona que no tiene buenas relaciones sociales podría no ser capaz de obtener ayuda en caso de enfermar.

Salir de casa, asistir a reuniones con amigos, visitar a familiares y en general sentirse miembro de un grupo, enriquece enormemente nuestra vida.

En resumen, aunque algunas personas parecen estar bendecidas con la longevidad gracias a su estilo de vida, esta es una excepción y no una regla. Para la mayoría de nosotros, llegar a la edad adulta estando sanos requerirá de gran esfuerzo y atención a todos los factores mencionados

Consejos para prevenir robos y timos a personas mayores

Los delincuentes suelen considerar a las personas mayores como víctimas propicias para conseguir sus objetivos, tanto por medio de la agresión como del engaño.

A continuación presentamos algunas precauciones que deben tomar al salir a la calle o en su propio hogar para evitar sufrir timos o robos.

– Desconfíe de personas desconocidas que se ponen en contacto con usted ya sea:

En su vivienda, haciéndose pasar por supuestos empleados de un servicio de suministro (agua, electricidad, gas, etc.), utilizando el cebo de una persona que viene a limpiarle una mancha o al ofrecerle la venta de presuntos objetos valiosos que son falsos o inexistentes.

Por teléfono, solicitando dinero para que les pueda entregar un supuesto premio que ha ganado.

En la calle: Al sacar dinero en efectivo de la sucursal bancaria, sobre todo en fechas próximas al ingreso de la pensión o al efectuar operaciones en cajeros automáticos.

En ocasiones, los delincuentes colocan dispositivos en los cajeros automáticos para copiar la información de su tarjeta. Para obtener su clave suelen emplear un teclado superpuesto o una pequeña cámara que graba sus movimientos. Por ello, es conveniente observar si hay algo anormal en el cajero y ocultar el movimiento de sus dedos sobre el teclado cuando introduzca su número secreto.

 

– Además, no permita negligencias cuando requiera cuidados, ni abusos si tiene una situación de dependenciaInforme de ello en Comisarías de Policía, juzgados o servicios asistenciales. Valore e infórmese sobre los diferentes dispositivos de Teleasistencia, es una muy buena solución para determinadas situaciones y emergencias.

 

Medidas de seguridad al caminar por la calle.

– Siempre que pueda, procure no transitar por lugares solitarios o poco alumbrados. Camine en sentido opuesto a la marcha de los vehículos, lo más alejado posible del bordillo, situando su bolso o cartera hacia el interior de la acera, de manera que pueda evitar los “tirones“.

– Lleve sólo el dinero necesario y distribúyalo en sus bolsillos. Evite llevar el dinero en el bolsillo trasero de su pantalón. Cuando se disponga a utilizar los servicios de los cajeros automáticos, observe antes a su alrededor por si hubiese personas sospechosas que podrían apropiarse del dinero obtenido a la menor oportunidad. Si tiene dudas respecto de determinadas personas, no utilice el cajero en ese momento, o diríjase a otro que haya cerca.

– Preste una especial atención a la entrada o salida de los transportes públicos. Evite las aglomeraciones como mercadillos, ferias y verbenas. Si alguien tropieza con usted compruebe si le han quitado la cartera. Cuando vaya de compras, no se distraiga. Observe con atención a las personas próximas a usted y no pierda el contacto con su bolso. Compruebe que los cargos recibidos se corresponden con los realizados y conserve todos los justificantes y resguardos hasta que reciba y verifique su compra.

No abandone las copias de los resguardos de compra en las proximidades de los Terminales de Punto de Venta o cajas donde ha pagado, pues contienen información sobre las tarjetas que puede ser utilizada tanto en Internet como fuera de la red.

– Si se siente perseguido yendo en su coche, toque el claxon constantemente para llamar la atención y diríjase a una comisaría o lugar concurrido. Gritar y pedir socorro puede intimidar al asaltante, así como atraer la atención de otras personas.

– Si le están robando, no oponga resistencia. Observe las características esenciales de su agresor (edad, estatura, color de pelo, rasgos de su rostro, nacionalidad, acento al hablar, vestimenta, dirección de la huida, vehículo utilizado, etc.). Cuanto más precisa sea su información, mayores serán las posibilidades de localizar al delincuente y recuperar los objetos sustraídos.

Si son varios los agresores, procure centrarse en uno de ellos, el que tenga más próximo o el que más destaque. Esto servirá para descubrir posteriormente al resto del grupo. Después de haberse cometido el delito, si le es posible, avise a la Policía o Guardia Civil y explíqueles todo lo que recuerde. Mientras espera su llegada, anote sus observaciones y no coloque ni toque nada, ya que podría destruir involuntariamente las pruebas del delito.

Timadores

Las zonas comerciales y de ocio reúnen a gran número de personas y son un entorno perfecto para la actuación de carteristas, timadores, descuideros y otros delincuentes. Recuerde también estas pautas:

– Nunca saque dinero de su banco a requerimiento de desconocidos, aunque le ofrezcan, aparentemente, un gran negocio.

– Los “trileros” son especialistas timadores y es frecuente verlos en las plazas y calles céntricas o típicas de turistas de todas las ciudades. Con tres naipes, vasos o cáscaras de nuez animan a los viandantes a descubrir dónde se encuentra una carta o se oculta una bolita. No participe en ese supuesto “juego”, perderá seguro.

Entre los timos más conocidos y habituales se encuentra el timo del “tocomocho”: hacer creer a la víctima que puede beneficiarse del cobro de una participación premiada de la lotería o el “timo de la estampita”, que consiste en hacer pasar recortes de periódico por billetes de curso legal.

Estas son algunas de las recomendaciones que da la Policía especialmente para personas de edad avanzada, más solas y vulnerables a cualquiera de estas situaciones. Es importante no olvidarlas, pero sobre todo, que no impidan que usted salga a la calle por miedo. Prevención sí, pero en su justa medida.

Vacaciones y seguridad en el hogar

Se acerca el verano y las vacaciones. Muchos mayores se irán a pasar el verano con familiares o al pueblo y es importante tener en cuenta una serie de medidas preventivas para no tener sorpresas desagradables al regreso. Igualmente, las personas que se queden en casa o que no salen muy a menudo, deben ser precavidas.

1.- Plantéese siempre estas tres preguntas:¿Qué debo proteger?, ¿Contra qué he de protegerlo?, ¿Cómo puedo protegerlo?:

Para proteger tanto su persona como sus bienes, es adecuado hacer un listado de riesgos y amenazas posibles. Podemos contratar y utilizar medios humanos, electrónicos, barreras físicas. Es importante seguir ciertos procedimientos y protocolos de actuación.

2.- Haga un pequeño listado telefónico de emergencias para tenerlo siempre a mano, así como los teléfonos de familiares y vecinos de confianza.

3.- No olvide llevar siempre puesto dentro de casa el pulsador del servicio de telesistencia.

 MEDIDAS DE PROTECCIÓN EN CASA

– Ponga dificultades a los delincuentes y desistirán de sus intenciones. Propóngase el reto de mejorar su seguridad personal y la de su entorno, vivirá mejor y más tranquilo.

– Si nuestra ausencia va a ser prolongada, debemos evitar comentarlo a personas que no sean de máxima confianza. En estos casos cuanta menos gente lo sepa, mejor.

– Lo que SÍ debemos hacer es dejar las llaves de nuestra casa y buzón a una persona de total confianza, para que pueda acceder a ella en caso de una emergencia (incendio, inundación o sospecha de robo, por ejemplo). También le pediremos que revise el buzón y retire el correo para que no se acumule y dé pistas a los ladrones de la ausencia de gente en la vivienda.

– Cerrar las llaves de paso de agua y de gas para que no haya fugas.

– No baje todas las persianas totalmente.

– Asegúrese de que las puertas y ventanas quedan correctamente cerradas, y que no existe ninguna otra entrada posible.

–  No deje ninguna copia de la llave escondida bajo el felpudo, en la jardinera o sobre el marco de la puerta, son los primeros lugares que comprobarán los ladrones.

Active si es posible el desvío de llamadas de tu teléfono fijo para que siempre pueda contestarlas aunque esté fuera. (El delincuente no sabrá desde donde contesta).

– Si es usuario de teleasistencia, avise a las teleoperadoras de su ausencia y su regreso.

Los ladrones utilizan señales en clave para saber qué viviendas están deshabitadas y cuantas personas viven en ellas. Normalmente hacen unas muescas o dibujos, junto a la puerta, en el telefonillo y en el buzón para saber en qué pisos pueden entrar a robar. Si detectamos alguna señal sospechosa en estos lugares, lo mejor será que las borremos en la medida de lo posible para que sea ilegible. Debemos estar alerta sobre merodeadores desconocidos y avisar a la policía.

– Tenga presente que una mayor eficacia en la seguridad de su vivienda se logra instalando dispositivos electrónicos de alarma. Si decide instalar algún sistema de alarma o Circuito Cerrado de Televisión, compruebe que la empresa a contratar cumple todos los requisitos legales y pida por lo menos tres presupuestos.

Cuidado con algunas empresas instaladoras. Bajo unas fuertes campañas de publicidad, se esconden además de permanencias no deseadas, un software en los equipos que instalan, que no le permitirá migrar si lo desea a otras empresas con los elementos que ya sean de su propiedad y tendrá que comprarlo todo de nuevo. Infórmese.

– Si tiene una salida prolongada fuera de casa, instale programadores que enciendan y apaguen alguna luz, radio o televisión. Las posibilidades que existen en el mercado son amplísimas, consulte a profesionales según tus necesidades y presupuesto.

– Si sale de casa no olvide cerrar con llave la puerta de su vivienda.

– Si pierde las llaves de casa, instale una nueva cerradura o bombín lo antes posible, puede que se las hayan sustraído. Nunca ponga etiquetas al llavero.

– Haga un inventario de sus objetos de valor incluyendo fotografías, si es posible, y anote todos los datos que puedan ayudar a identificarlos en caso de robo.

– En ocasiones, los delincuentes prefieren entrar en los domicilios cuando sus ocupantes están en el interior, y así, lograr sus objetivos bajo amenazas. Sea precavido al entrar y al salir de casa, del portal, al coger el ascensor y al aparcar el coche en el garaje, la sorpresa juega a favor del delincuente.

– Recuerde el consejo que se da a los niños: No abras a desconocidos. Compruebe antes por la mirilla quien llama.

– Instale en su vivienda una puerta de seguridad. Si su puerta no es blindada, procura que tenga, al menos, dos puntos de cierre, y que no exista hueco entre la puerta y el suelo. Refuerce la parte de las bisagras con pivotes de acero y ángulos metálicos que impidan apalancar.

– Coloque en la puerta una mirilla panorámica que le permita ver de cuerpo en entero a la persona que llama. Si es posible, instale dentro de su casa un dispositivo para encender la luz del rellano.

– Ponga persianas en todas sus ventanas y balcones y asegúrelas con un cerrojo interior. Coloque rejas en aquellas ventanas de fácil acceso desde el exterior. No deje entre las barras una separación mayor a 12 cm.

– Proporcione a las ventanas un cierre eficaz. Si puede, utilice cristal aislante inastillable. Además de ser seguro, insonorizará su vivienda.

– No olvide que los balcones, aleros, salientes de muros, tuberías, etc., pueden ser trepados con relativa facilidad por los delincuentes. Preste más atención a las ventanas o terrazas próximas a estos puntos.

– No acciones el portero automático si desconoce quien llama, compromete la seguridad de todos los vecinos. La instalación de un vídeo-portero mejoraría la seguridad del edificio.

Pida siempre al personal de las empresas de servicios (teléfono, electricidad, gas, agua…) que se identifique. Compruebe la visita de estos empleados llamando a la empresa correspondiente. Rechace el número de teléfono de la tarjeta que le muestre, ya que podría ser el de un cómplice. Si tiene alguna duda, mantenga al visitante fuera del domicilio, con la puerta cerrada o la cadena de seguridad puesta, mientras comprueba la visita.

– Recuerde que si al llegar a su casa encuentra la puerta forzada o abierta, no debe entrar. Comuníquelo a la Policía o a la Guardia Civil por el procedimiento más rápido, le prestarán ayuda de inmediato.

Teleasistencia móvil: Protección y geolocalización de personas.

Los avances en la tecnología aportan nuevas y excepcionales soluciones a la teleasistencia. Actualmente, ya no hablamos tan solo de la teleasistencia domiciliaria, pensada para estar conectada a la red telefónica del domicilio y ofrecer una cobertura correcta en el domicilio.

La teleasistencia móvil cobra importancia y es cada día más demandada por personas que desean una protección y seguridad completa, tanto cuando están en sus casas como para cuando salen a pasear.

FUNCIONAMIENTO:

El funcionamiento es sencillo y muy similar a la teleasistencia de toda la vida. La persona pulsa al botón de emergencia (SOS) e inmediatamente entra en comunicación con nuestros teleoperadores. La ficha personal con sus datos personales y médicos se abre automáticamente, de modo que ya podemos además de hablar con él directamente, llamar a los servicios sanitarios o a sus familiares y si es necesario, solicitar su posición exacta gracias a la tecnología GPS que incorpora el terminal.

El terminal actualiza cada 2 minutos la posición, indicando a su vez la precisión exacta en metros. Esta precisión dependerá de si la persona está al aire libre o ha entrado en un sitio cerrado o subterráneo. La posición GPS solo es posible si estamos en la calle.

Igualmente, si la persona está en un garaje o centro comercial, el programa permite visualizar el recorrido que ha llevado la persona hasta el momento de entrar en estos lugares de modo que la localización también sería posible. Podemos ver por dónde ha paseado, qué paradas ha realizado y desde cuando está en el centro comercial.

Con posterioridad, los teleoperadores del centro de atención realizarán un seguimiento hasta que la alerta producida haya quedado resuelta.

Al funcionar con una tarjeta SIM de móvil, podemos tanto contestar a sus llamadas como llamarle al propio terminal para hablar con ella. Tampoco es necesario el contacto por voz para obtener posición, lo que es muy útil para encontrar a personas con demencia que pudieran desorientarse y perderse al salir a dar un paseo.

Añadido al botón de emergencia, el aparato incluye otras dos teclas con números de teléfono grabados que pueden ser de familiares o del cuidador para que en caso de emergencia pueda llamarles con la máxima celeridad.

El terminal es más pequeño que un teléfono móvil, ligero y sencillo en su funcionamiento. Es necesario cargar diariamente la batería y protegerlo de golpes. Funciona directamente con el altavoz activado para que el sonido sea perfecto aún en un lugar con mucho ruido o en una situación de emergencia donde no podamos agarrarlo como un móvil.

USUARIOS POTENCIALES:

–          Enfermemos de Alzheimer u otras demencias en primeras etapas de la enfermedad que sufren episodios de desorientación pero aún se encuentran bien físicamente para salir a pasear.

–          Personas mayores pero autónomas que viven solos y quieren viajar con una seguridad de atención inmediata en casos de caídas o cualquier emergencia allí donde estén.

–          Mayores o dependientes que precisan la teleasistencia pero no disponen de teléfono fijo en su casa.

–          Personas en riesgo por violencia de género.

–          Empresarios que deseen protección ante riesgo de robo o secuestros.

–          Trabajadores que precisen ciertas medidas de protección de riesgos laborales proporcionando su localización permanente al empresario.

OBJETIVOS:

–          Potenciar la autonomía e independencia del usuario

–          Ofrecer atención permanente a los usuarios del servicio, mediante la telefonía móvil y geolocalización, integradas en el terminal ante situaciones de riesgo.

–          Responder rápida y eficazmente a las posibles situaciones de emergencia.

–          Mejorar la calidad de vida de los enfermos y cuidadores.

–          Garantizar la seguridad personal y laboral de empresarios y trabajadores.

–          Ayudar y proteger a víctimas de violencia de género con miedo a salir y ser agredidas.

Alimentos para cuidar la memoria

“Mens sana in corpore sano”

La relación cuerpo-mente es recíproca, por lo que el cuidado de uno se reflejará directamente en la otra y viceversa.

Según vamos cumpliendo años, desatendemos nuestra alimentación y sin embargo, está demostrado que para que la “gimnasia mental” y los cada día más populares “talleres de memoria” consigan mejores resultados habrá que alimentar correctamente el cerebro.

No basta con abandonar los alimentos grasos y comer más verdura, debemos ampliar la dieta e incluir nuevos alimentos así como algún complemento nutricional si fuese necesario. Nuestros mayores tienen problemas para metabolizar correctamente algunos alimentos y otros que antes no eran perniciosos, ahora no son aconsejables en sus comidas.

¿Qué alimentos mejoran la actividad cerebral? ¿Podemos prevenir la aparición de pequeños olvidos, algunas demencias y otras enfermedades? La respuesta es afirmativa, preservar la memoria y nuestra agilidad mental será más fácil cambiando algunas rutinas alimenticias.

  1. Ácido fólico (B9): Previene el deterioro cognitivo. Ayuda a aumentar la velocidad con que procesamos la información y además, mejora notablemente el rendimiento mental y la concentración..Pierde propiedades con el calor durante la cocción, por lo que se aconseja ser constante y tomar crudos alguna vez. Lo encontramos en la soja, garbanzos, espárragos, avellanas, nueces, huevos, tomate, envidia, remolacha y coliflor.
  2. La rapidez mental y alerta se consigue con minerales como silicio, calcio y fósforo. Encontraremos silicio en las infusiones de cola de caballo, el salvado y el té de cebada.  El fósforo en un buen caldo de pescado o almejas, sin olvidar el bacalao ahumado, las sardinas y el queso. La leche y sus derivados aportarán el calcio que interviene en la transmisión de impulsos nerviosos.
  3. Los alimentos que contienen fósforo y azufre mejoran la toma de decisiones.
  4. Hierro y zinc. El Hierro influye en el rendimiento y en el transporte de oxígeno a las células (carnes rojas, vísceras, legumbres y frutos secos), y el Zinc parece estar relacionado con la actividad de los neurotransmisores (ostras, crustáceos, carne de cordero y las leguminosas.
  5. Nueces y  pasas, contienen un aminoácido muy importante que no se encuentra en otros alimentos.
  6. Consuma pescados azules, ricos en ácidos grasos esenciales de la serie omega-3. (salmón, caballa, atún)
  7. El aceite de oliva virgen y el ajo crudo ayudan también a evitar los fallos de memoria.
  8. Tome habitualmente lecitina de soja. Es un fosfolípido integrante de las membranas de las neuronas.
  9. Todas las vitaminas del complejo B colaboran en el proceso de producción de neurotransmisores, específicamente la B1  que ayuda a mejorar la concentración (carne de cerdo y levadura de cerveza), B6 (melón, pollo y plátano) y la B12 (hígado, huevos y queso), esta última es muy importante para contrarrestar el estrés, la pérdida de memoria y fortalecer la agilidad intelectual.
  10. Vegetales con propiedades antioxidantes: ajo, el alga spirulina, la soja, el germen de trigo, el té, el vino (especialmente el tinto), el pescado, algunas verduras (brécol, col, zanahorias, cebollas, espinacas y tomates) y ciertas frutas (uvas, cítricos -naranja, limón y pomelo-, ciruelas, fresas, frambuesas, grosellas y arándanos)

En herboristerías se pueden encontrar algunos complementos como la  Fosfatidilserina, fundamental para mejorar la pérdida de memoria, Fosfatidilcolina que ayuda en la formación de neurotransmisores, L- Glutamina, Aceite de Chía y de Onagra, Borojo (fósforo natural) etc…

Lo importante, es tomar conciencia de que todo lo que comemos va a tener consecuencias en nuestro organismo y que la memoria se podrá ver muy beneficiada como resultado de una correcta alimentación en nuestros mayores.

Alimentación, actividad física y un estilo de vida saludable serán la clave para cumplir años satisfactoriamente.

Población mayor en España y Teleasistencia

La población española envejece a un ritmo vertiginoso y en la actualidad los mayores de 65 años superan ya los 8 millones de habitantes.
Un dato sorprendente es el incremento de hogares en los que vive un solo individuo desde que comenzó la crisis, llegando al 20% del total. Todavía más destacable el es hecho de que más de la mitad de esos hogares, los compone una persona mayor de 65 años.
En España, una de cada 5 personas mayores viven solas, de las cuales casi el 77% son mujeres.

Es decir, aumenta la tendencia a vivir una vejez en soledad debido a diversos factores:
– Mayor esperanza de vida.
– Mejor calidad y nivel de salud en la vejez.
– Problemas económicos que impiden ingresar en una institución o residencia.
– Deseo de independencia y programación de la propia vida.
– Inexistencia de familiares.
– Mala relación o desapego familiar.
– Miedo a provocar roces o conflictos en la familia.
– Falta de espacio en casas de familiares.
– Costumbre de vivir en soledad (solteros, divorciados o viudos jóvenes).
– Rechazar el abandono del propio hogar (por costumbre, red vecinal y de amigos, mayor tranquilidad y organización).
– Sensación de estorbo y autoexclusión social.

Para estas personas que por decisión personal o como consecuencia de la situación económica y social viven solas, está especialmente indicada la teleasistencia domiciliaria.
Este servicio garantizará la seguridad en el hogar, el control de toma de medicaciones y citas médicas, atención y compañía en casos determinados y la obtención de ayuda en caso de emergencia sanitaria, así como la independencia del mayor y la tranquilidad de los familiares.

El usuario de Teleasistencia responde a este perfil:
– Es una mujer mayor de 80 años, viuda y que vive sola.
– Se siente capaz de estar sola en casa debido a la seguridad que le ofrece este servicio y a que aún mantiene un buen nivel de autonomía personal.
– Precisa pequeñas ayudas para la limpieza del hogar, grandes compras y en el aseo personal pero todavía prepara su comida y en casa se mueve con soltura.
– Ocupa su tiempo en salir a pasear, realizar las labores domésticas y viendo la televisión.
– Las enfermedades más frecuentes son demencias en sus primeras etapas y poliartrosis.